miércoles, 24 de octubre de 2012

El picante y otras bondades del ají


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¿Por qué pica la Capsaicina?

En el ají, el sabor picante se origina de un modo diferente al de otros sabores. La capsaicina es un vailloide natural que influye los canales iónicos Ca+lo cual normalmente provocará sensación de  dolor y calor intenso.

El ají¿como analgésico?

De primera impresión resulta ilógico pensar que lo que produce dolor también lo alivie. Sin embargo la capsaicina ya era utilizada en tiempos antigüos para atenuar el dolor, incluso antes de la llegada de los europeos a América.
Además de favorecer la circulación sanguínea, la capsaicina actúa directamente sobre las células nerviosas. Normalmente, a raíz del consumo de capsaicina, las neuronas expulsan neurotransmisores.
 Tras comer cierta cantidad de ají, un cebiche por ejemplo, las neuronas expiden tal cantidad de neurotransmisores que el dolor termina cediendo. Ciertos estudios han determinado que la capsaicina es especialmente efectiva en casos de reumatismo, dolor de espalda y lumbalgia. Pero no lo olvide: primero consulte a su médico.  

¿Daña el ají el sentido del gusto o el estómago?

A pesar de consumir con regularidad ají, nuestra sensibilidad al ají no disminuirá. Lo único que podría suceder es que uno se acostumbre al ají. Comidas sin picante serán degustadas como antaño, no se ha comprobado que el ají insensibilice nuestro sentido del gusto o nos restrinja de apreciar otros sabores.
Por otro lado, el ají normalmente no afecta la mucosa estomacal. Por el contrario, el consumo de ají funge de antiácido y de este modo, reduce un poco el riesgo de contraer úlceras estomacales.
Sin embargo la función más importante del ají es acelerar el ritmo metabólico y estimular la circulación sanguínea. El ají y el pimentón (paprika) contienen además abundante vitamina C (ácido ascórbico). Para aprovechar el contenido vitamínico del ají y el pimentón, deben comerse frescos o no tan cocidos.

No hay como apagar el fuego

Suele suceder que, aún el más experimentado comeajíes, subestima el picante de un ají o una salsa y luego simplemente siente fuego en la boca. Contra esa sensación no he encontrado un método efectivo y universal, lo más usual es tomar un vaso de agua fría.
No obstante existen opiniones contrarias al respecto. Hay quienes aseguran que el agua fría agudiza la sensación de ardor en la boca, pues el agua no diluye la capsaicina sino la distribuye por toda ella. Quienes comparten esta opinión recomiendan tomar leche, pues la leche contiene grasa, la cual diluirá la fogosa sustancia.
Una tercera opinión indica comer pan o arroz (sin salsa), es decir alimentos que absorban la grasa donde la capsaicina se encuentre. De todos modos, si ya comió algo muy picante lo más seguro es que tenga que soportarlo.
Finalmente si prepara una sopa muy picante añada más agua o más papas y si es un guiso prepare más arroz o papas (según el acompañamiento que haya elegido).

Otros usos de la capsaicina

La capsaicina también se utiliza como ingrediente en los “sprays de pimienta” que muchos utilizan para defenderse ante posibles agresiones o robos. La capsaicina en los ojos quema cual infierno y un remedio eficaz no se conoce hasta el momento. 

Fuente: Cocina Peruana