Según una encuesta realizada por
el Instituto Médico de la Obesidad, el 40 % de las personas que han
subido más de 2 kilos durante las Navidades pasadas, no han
podido perder este peso a lo largo del año.
El 80% de los encuestados señalan como causa de su actual estado “comer más de la cuenta platos que engordan”.
Los hombres reconocen “pecar” más en alcohol y dulces.
Las mujeres entre 45 y 65 años de edad abandonan la práctica de ejercicio entre los días festivos y se limitan en dar paseos con amigos o la familia.
El 80% de los encuestados señalan como causa de su actual estado “comer más de la cuenta platos que engordan”.
Los hombres reconocen “pecar” más en alcohol y dulces.
Las mujeres entre 45 y 65 años de edad abandonan la práctica de ejercicio entre los días festivos y se limitan en dar paseos con amigos o la familia.
En vísperas de Navidad, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) ha hecho públicos los resultados de una significativa
encuesta que de forma directa hace la pregunta más incomoda
para los españoles cuando se trata de excesos y sobrealimentación:
¿Cuánto peso ganas durante las Navidades?.
El cuestionario está
compuesto por diez preguntas elaboradas por especialistas en nutrición del IMEO que giran alrededor del peso acumulado
durante esta época y “el patrón” seguido: cuántos kilos se
han ganado, si se han podido perder a lo largo del año, cuánto
tiempo se ha tardado en conseguirlo y en qué más se “ha pecado” a la
hora de comer. La encuesta también observa otras causas, como
la ansiedad y el estrés, el estado emocional, el embarazo y el afán
por los platos hipercalóricos, que hayan podido influenciar en el exceso
de peso.
De todos los encuestados –un total
de 56 personas entre 20 y 65 años de edad, 41 mujeres y 15 hombres–
sólo un 18% manifiesta estar en su peso
ideal. Un 21% reconoce tener un sobrepeso inferior a 15 kilos. No
obstante, más de la mitad de los participantes (el 52%), presenta
síntomas de obesidad, pesando hasta 25 kilos de más. Un
porcentaje muy significativo, aunque minoritario que llega al 9% del
colectivo, padece obesidad severa con más de 30 kilos por encima de su peso ideal.
Los excesos navideños en la comida
del año pasado han repercutido de la siguiente forma en los
entrevistados: un 20% niega haber subido más de 1
kilo durante las festividades, el 60% reconoce un incremento entre 2
y 3 kilos, mientras que un 20% se queja de haber cogido más de 3 kilos.
“Los resultados de la encuesta sólo confirman lo que
ya sabemos en consulta, destaca Rubén Bravo, coordinador de la
unidad de nutrición de IMEO: las personas con un mayor grado de obesidad
acumulan con más facilidad un peso que les resulta muy
difícil perder sin ayuda de los especialistas”. Los datos avalan
este lema. La mayoría de las personas que tienen más de 20 kilos de
sobrepeso han ganado entre 3 y 7 kilos durante las navidades
pasadas, sin poder recuperar el peso inicial al cabo del año.
“Estos
suelen ser “comedores compulsivos”, saben que no deben
pasarse con las cantidades y los platos
hipercalóricos, pero sin embargo lo hacen con la excusa de las
Navidades”, añade Rubén Bravo. Según la encuesta, un 80% de los
participantes han señalado como causa de su actual estado, que comen
más de la cuenta platos que engordan. A esta observación se suman
más factores, como el estado emocional, el estrés y la ansiedad, entre
otros. En tiempo y esfuerzo no es lo mismo perder dos o
tres kilos que perder cinco o seis. “Uno de los motivos para el
fracaso de las dietas es su duración, a más tiempo, más fácil es el
abandono y por lógica a más peso, más tiempo durara el plan
alimenticio”, recalca el experto de IMEO.
Entre los alimentos más
irresistibles se encuentran los dulces, turrones y pasteles. Llama la
atención que un 80% de los hombres señalan esta tentación
para el paladar como “un problema principal”, mientras las mujeres
intentan reducir su consumo (un 60% de las féminas marca esta
respuesta). Las tapas, el queso y el chorizo son otras de las
comidas con poder seductor por parte igual para
hombres y mujeres, pero esto sí, siempre se pican entre las comidas
principales, según reconocen el 40%. El liderazgo en las copas
lo tienen los representantes del sexo masculino que no han
disminuido su interés hacia el alcohol y los brindis.
Más factores que propicien el hecho que pesamos más en Navidad son la escasa actividad física
que se ejerce durante estos días y el
hecho que obviamos la cultura alimentaria a la hora de reducir los
azucares y la grasa en la comida. A penas un 30% de los entrevistados
mantiene su rutina habitual y practica algún deporte entre
los días festivos. El 16% varía las comilonas con discotecas y baile
social y la gran mayoría, más del 60%, en los que predominan las
mujeres entre los 45 y 65 años de edad, vagamente señala que
se limita en hacer breves paseos con la familia y los amigos para
facilitar la digestión.
Fuente: auriculoterapia