miércoles, 4 de diciembre de 2013

Nueva técnica para regenerar hueso

 

Unos investigadores han creado lo que podría definirse como un bioparche, y que sirve para regenerar hueso perdido o dañado. La regeneración se lleva a cabo por medio de la colocación de ADN dentro de una partícula de tamaño nanométrico que transporta instrucciones para producir hueso directamente al interior de las células.

La técnica de regeneración ósea, creada por el equipo de Aliasger Salem y Satheesh Elangovan, de la Universidad de Iowa en Estados Unidos, se basa en una plataforma de colágeno "sembrada" con partículas que contienen los genes necesarios para producir hueso.

En los experimentos, el bioparche logró con éxito hacer crecer hueso de nuevo y en cantidad suficiente para rellenar espacios en heridas de los cráneos de animales de laboratorio.

También consiguió estimular un nuevo crecimiento en células de estroma de médula ósea humana en experimentos de laboratorio.

El aspecto más novedoso y prometedor de esta técnica probablemente sea el hecho de que los investigadores enviaron instrucciones para generar hueso directamente a células óseas vivas, logrando que esas células produjeran las proteínas que conducen al crecimiento óseo. Los intentos previos se habían basado en numerosas aplicaciones desde el exterior, lo cual es costoso, intensivo, y más difícil para la obtención de resultados predecibles y repetibles.

El bioparche hace que vuelva a crecer hueso en el punto de un cuerpo vivo donde se necesite y empleando células ya existentes en él. (Imagen: Satheesh Elangovan, Universidad de Iowa)

 

El parche tiene varios usos potenciales en odontología. Por ejemplo, podría ser usado para reconstruir el hueso en el área de la encía que sirve como base para los implantes dentales. Esto resultaría providencial para pacientes que necesitan implantes y no tienen suficiente hueso en el área circundante.

También podría ser usado para reparar defectos de nacimiento en casos en los que falta materia ósea en la cara o en otras partes de la cabeza.

Fuente: Iowa Now